EL COMPROMISO CON LA NIÑEZ CRUZA FRONTERAS
Desde el inicio de la pandemia, el compromiso con las niñas y niños más vulnerables se ha fortalecido, especialmente en apoyo a su educación. Por lo mismo World Vision y UNICEF siguen adelante con el proyecto “Intervenciones Estratégicas en Educación” en Norte de Santander.
La actual emergencia por COVID-19 puso entre la espada y la pared a miles de niñas y niños migrantes que ya venían viviendo una dura realidad producto de la crisis migratoria venezolana. Según el informe “Niñez venezolana, entre la espada y la pared”, desarrollado por World Vision, el éxodo masivo de personas desde el vecino país sobrepasó las capacidades de los países que han venido recibiendo un alto flujo migratorio.
Una situación agravada por la “ausencia de apoyos específicos que ha derivado en la estigmatización, xenofobia, desamparo y el cruce ilegal de fronteras, con un alto riesgo de trata y tráfico, entre otros”. El informe también revela que los efectos e impactos que produjo la pandemia especialmente a la niñez y familias migrantes:
•Pérdida de fuentes de ingreso: 84% de la población migrante ha visto empeorada su situación económica y de ingresos.
•Desalojos: el 28% de los migrantes están en riesgo de desalojo por la incapacidad de pago.
•Separación familiar: 1 de cada 4 niñas y niños migrantes permanecen separados de sus madres y padres.
•Continuación de procesos educativos: solo el 37% de los de las niñas y niños migrantes continúan sus procesos escolares.