CUBA SE CANSÓ DE LA DICTADURA

Por primera vez en más de 60 años, miles de personas se lanzaron a las calles en una veintena de poblados y ciudades a lo largo y ancho de la isla al grito de «libertad» y «abajo la dictadura».

Ante la extensión de las manifestaciones, el presidente Miguel Díaz-Canel se presentó ante la televisión nacional para convocar a sus seguidores a salir a las calles a «enfrentar» a los manifestantes.

«La orden de combate está dada: a la calle los revolucionarios», afirmó el mandatario, quien atribuyó la actual crisis que vive la isla al embargo de Estados Unidos y a medidas del gobierno de Donald Trump.

Las protestas se iniciaron en la ciudad de San Antonio de los Baños, en el suroeste de La Habana y, desde entonces, se extendieron como chispa en polvorín por todo el país.

«Esto es por la libertad del pueblo, ya no aguantamos más. No tenemos miedo. Queremos un cambio, no queremos más dictadura», dijo en diálogo telefónico con BBC Mundo una manifestante en San Antonio.

Alejandro, que participó en la protesta en Pinar del Río, le contó a BBC Mundo que la protesta en su provincia se inició tras ver en redes sociales lo que estaba pasando en San Antonio de los Baños.

«Vimos la protesta en las redes y la gente empezó a salir. Este es el día, ya no aguantamos más», dijo el joven vía telefónica.

«No hay comida, no hay medicinas, no hay libertad. No nos dejan vivir. Ya nos cansamos», agregó.

BBC Mundo contactó con el Centro de Prensa Internacional, la única institución del gobierno autorizada a dar declaraciones a medios extranjeros para conocer su posición, pero no tuvo respuesta inmediata.

Las protestas de este domingo, que fueron duramente reprimidas según muestran numerosos videos y cuentas de redes sociales, son un hecho sumamente inusual en una isla donde la oposición al gobierno no está permitida.